En 2002, durante la transmisión de CNN en español del paso por Nayarit del Huracán Kenna, los conductores advertían del riesgo a “los pobladores de Villa Hidalgo y las aldeas circunvecinas”. Como no habia redes sociales no tuvo consecuencias. Ayer, el boletín de @proceso incendió las redes nayaritas al calificar a nuestro estado de lugar despoblado entre Mazatlan y Vallarta así como de Aldea al Puerto de San Blas.
La verdad, esa discusión desvió la atención de la real devastación material que el Huracán Roslyn dejó en una amplia franja del territorio nayarita. Mas que de polémicas estériles, es tiempo de solidaridad y apoyo a las familias afectadas en el norte de nuestros estado.
El boletín que reprodujo la Revista Proceso no deja de ser una mala anécdota del desconocimiento territorial de las agencias internacionales de noticias. Nada nuevo.
Apoyemos a nuestros paisanos en desgracia.
En estos tiempos de crisis universitaria se distingue la esclavitud del hombre como la sujeción de un espíritu débil y cobarde que no es dueño de su voluntad, ya que aún con los últimos acontecimientos seguimos creyendo en el borrón y cuenta nueva, recordando que para ello fue creado el CGU, como se ha demostrado en los últimos años.
Por tanto, los universitarios rebeldes caminaremos con la frente en alto y con los valores humanos hacía la reconquista de nuestra AlmaMater. Sin embargo las demás almas agachando la cabeza en señal de sumisión marcharán tomando calles hacia la esclavitud del pensamiento.
Lo anterior puede ser intelectual, psicológica o física ya que es un estado de ánimo en la mente que no les permite reconocer los grandes problemas dentro de la UAN, muchos integrantes del CGU y otros directivos nacieron y sé formaron cómo esclavos intelectuales en las filas de un sector universitario, por ello y para ellos se entregan en cuerpo y alma para corresponder a los compromisos que generaron desde su contratación o por los favores recibidos. Feuanos cómo maestros y directivos Feuanos, maestros sin perfil pero también feuanos, trabajadores beneficiados con la plazas por ser amigos o compadrazgo y algunos de ellos por una buena lana $ que llega a dónde la plata $ brilla y donde los pesos suenan $. En fin, ahora en nuestros días en todos los sectores huele a pólvora y para muchos ya está mojada, la 4T pronto hará su presencia y más de alguno ni tiempo tendrá de recoger sus tilichis, por ello, es importante recordar y resaltar que cómo lo escribió Marti “Ser cultos para ser libres”. Despierta universitario cada día somos más, “Por lo que es nuestro… . A lo universal”.
El TAMAL puede estar amarrado pero la fogata aún no arde. Por lo que No se calienten quienes ni experiencias tienen, qué para está contienda seguirán los cumbustibles fósiles. Sin embargo, la luz sé alcanza a ver detrás del túnel gubernamental y pronto la silla presidencial se verá brillar en la máxima casa de estudios.
Les recuerdo a mis detractores y FIFI’s Universitarios que NO SOMOS IGUALES. Y que LOS TIEMPOS CAMBIAN.
Debido a la violación del principio de legalidad, porque aplicó una ley ya abrogada de responsabilidad de los servidores públicos, un juez Federal ampara a Pedro Enríquez Soto ex titular del poder judicial de Nayarit, vinculado a proceso por el delito de enriquecimiento inexplicable.
En el razonamiento jurídico del juzgador Federal, se enuncia que se fundamentó el tipo penal específico en un artículo de una Ley que ya habría sido abrogada y que en su momento no fué actualizada por él legislativo estatal.
Es decir, qué para solicitar la vinculación a proceso del imputado se sirvieron de una Ley no actualizada, lo cual viola el principio de legalidad del procedimiento penal, por lo que el juez le otorgó el amparo al quejoso.
Esta situación implica qué para que se pueda juzgar al imputado, deberán primero actualizar la ley en comento y luego iniciar nuevamente el proceso, lo cual seguramente no pasará a corto plazo.
Sin embargo, el ya detenido e internado en el CEFERESO del Rincon, permanecerá ahí por los diversos que se le siguen, principalmente el que se refiere al fraude procesal relacionado al Infonavit, asunto que al parecer también se caerá.
Razones por las cuales un juez federsl otorgó amparo contra la vinculación a proceso a Pedro Enriquez Soto
Se creó uña sistema nacional anticorrupción a nivel constitucional y ello implicó también que se estableciera que la facultad de legislar en la materia, que incluye la de responsabilidades de servidores públicos, que ya es ya sólo facultad del congreso de la unión.
Se impuso por ello la obligación de armonizar todas las leyes que tengan alguna relación con el tema.
Materialmente la Ley de Responsabilidades de Servidores Públicos local fue derogada al entrar en vigor la norma general de la misma nomenclatura, pero en el estado no se realizó la acción legislativa pertinente.
El código penal en su artículo 255 que se refiere al enriquecimiento sigue refiriéndose a la norma local como el parámetro sobre el cual se determinan los delitos, la cual al ser una norma derogada no puede tener efectividad, lo correcto es que se reforme e indique cómo la norma referente la Ley General de Responsabilidades de los Servidores Públicos.
Esto seguro tendrá implicaciones a otras personas que han sido acusados de tal delito, más tarde que temprano.
Lo que se ocupa es que el Congreso del Estado se ponga las pilas para realizar la reforma, para evitar problemas con los delitos que en el fururo puedan imputarse a otras personas y no generar impunidad.
Ccp Alba Cristal Espinoza, presidenta de la comisión de gobierno legislativo del Congreso de Nayarit.
Aunque el Fiscal de Nayarit Petronilo Díaz Ponce reconoce el innegable valor y reputación de la revista Proceso, dice que en el reportaje sobre su trabajo al frente de la institución y que supuestamente “contrato sicarios” está fuera de contexto pues fue designado en el cargo por el Congreso en septiembre del 2017, por lo que los hechos que le imputan son anteriores a su labor.
Asegura que el Fiscal no contrata policías directamente, sino que existen normas imposibles de no aplicar, que piden perfiles definidos, además de existir un sistema de control y confianza del gobierno federal, al que somenten a todo el personal, incluido el propio titular de la fiscalía.
“En Nayarit el 94% de los policías han sido sometidos a exámenes de control y confianza, lo que hace prácticamente imposible que los policías sean reclutados entre sicarios”, como se asegura en el reportaje.
Afirma estar en la mejor disposición de aclarar lo que casos que pudieran generar dudas, pero es mejor aclararlo para que no quede duda de su integridad y vocación de servicio.
Por: Alejandro Caballero.
Tomado de: Proceso.
Esta madrugada, alrededor de las 4:30 horas falleció el periodista Julio Scherer García.
El fundador de Proceso, murió de un choque séptico. Llevaba poco más de dos años enfermo, principalmente de problemas gastrointestinales. En abril, cumpliría 89 años.
El 17 de octubre pasado hizo lo que sería su última visita a la redacción que tanto amó.
Al despedirse, a las puertas de las oficinas del semanario que fue su vida durante sus últimos 38 años, dijo a este reportero, los ojos húmedos, que Proceso había costado muchos sacrificios y trabajo y se despidió intentando una sonrisa.
Prometió, un hilo su voz, que regresaría para el aniversario 38 del semanario. Ya no pudo.
Siempre lejos de los reflectores, renuente a las entrevistas, fiel a su estilo de vida, sus funerales serán privados.
Al inicio de la década de los cuarentas del siglo pasado, antes de cumplir los 18 años, Scherer García ingresó al diario Excelsior. Tuvo una carrera fulgurante. Inició como mandadero de la redacción y unos días antes de cumplir los 22 años ya publicaba en el vespertino Últimas Noticias y un año después en Excelsior, en cuyas páginas se pueden encontrar notas, entrevistas y reportajes bajo su firma, de septiembre de 1949 a abril de 1976.
Julio Scherer asumió la dirección del entonces el diario más importante del país, a los 42 años, el primero de septiembre de 1968. Desde esa posición, acabó confrontado con los presidentes Gustavo Díaz Ordaz (1964-1970) y Luis Echeverría (1970-1976).
A su salida de Excelsior, el 6 de junio de 1976, luego de una maniobra orquestada desde la presidencia de Echeverría, junto con decenas de compañeros de aquel diario fundó el semanario Proceso, cuyo primer número apareció el 6 de noviembre de 1976.
Scherer García, quien asumió la dirección de Proceso a los 50 años, nunca dejó la actividad reporteril. El 7 de diciembre de 2014, un mes antes de su muerte, de 88 años, publicó su último texto a propósito del fallecimiento del también periodista y escritor, su amigo, Vicente Leñero.
Considerado el mejor periodista mexicano de la segunda mitad del siglo pasado y de lo que va del actual, Scherer García estudió la carrera de derecho y de filosofía en la UNAM, pero pronto acabó por dirigir todos sus esfuerzos a lo que sería su máxima pasión: el periodismo.
No hubo tema que no tocara: pobreza, menores de edad, desastres, tragedias, conflictos estudiantiles, protestas laborales, religión, grilla política, asuntos internacionales, pintura, literatura y las artes en general, aunque el de la corrupción gubernamental aparece como una constante.
Bajo su dirección, Proceso publicó portadas memorables como aquella titulada El hermano incómodo, del 19 de noviembre de 1994, acompañada de una foto del recientemente exonerado Raúl Salinas de Gortari.
O esa de La casa de Durazo en el Ajusco en julio de 1983, sobre las corruptelas del que fuera jefe de la policía capitalina en el sexenio de José López Portillo, junto a otro reportaje sobre El Partenón, una narco mansión construida para ese siniestro personaje en Zihuatanejo, Guerrero.
Recordada también es la portada de enero de 1983 con el título El refugio de López Portillo en Acapulco, cuyo reportaje en interiores se destacó curiosamente con la cabeza: Una casita blanca de 2 millones de dólares en Puerto Marqués.
El 8 de enero de 1994, el país en un hilo por la declaración de guerra del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, en la redacción de Proceso se recibió una invitación del EZLN dirigida a Scherer García para que este, junto con la Premio Nobel, Rigoberta Menchú y el obispo Samuel Ruíz, fungieran como intermediarios ante la eventualidad de un diálogo con el gobierno.
La respuesta del entonces director de Proceso lo pintó de cuerpo entero:
“Agradezco la inclusión de mi nombre al lado del obispo Samuel Ruiz y de la señora Rigoberta Menchú. Sin embargo, mi condición de periodista me obliga a la imparcialidad, difícil de sostener en la doble condición de mediador y cronista de los acontecimientos que vivimos. Debo, pues, cumplir exclusivamente con las reglas de mi profesión”.
Julio Scherer García escribió un total de 22 libros entre 1965 y 2013. Después del primero, titulado Siqueiros: La Piel y la entraña (1965) (FCE 2003), debieron pasar 19 años para publicar el segundo, el inolvidable Los Presidentes (Grijalbo 1986).
El director fundador de Proceso y hasta su muerte, presidente del Consejo de Administración de CISA, la empresa que edita el semanario, se ocupó en sus libros de expresidentes, de la matanza de Tlatelolco, de las cárceles, de sus más renombrados presos, de los presidentes de Chile, Salvador Allende y Augusto Pinochet, y de temas como el de los secuestros y la delincuencia de menores de edad, así como en un par de ellos, a su vida, su única, de periodista.
Después de Los presidentes escribió:
El poder: historias de familia (Grijalbo 1990); Estos años (Océano 1995); Salinas y su imperio (Océano (1997); Cárceles (Alfaguara 1998); Parte de Guerra, en coautoría con Carlos Monsiváis (Aguilar 1999); Máxima seguridad (Random House Mondadori 2001); Pinochet, vivir matando (Alfaguara 2000 y Nuevo Siglo-Aguilar 2003); Tiempo de saber: Prensa y poder en México, en coautoría con Carlos Monsiváis (Aguilar 2003); Los patriotas. De Tlatelolco a la guerra sucia (Nuevo Siglo Aguilar 2004); El perdón imposible (FCE) (Versión ampliada de Pinochet, vivir matando); El indio que mató al padre Pro (FCE 2005); La pareja (Plaza & Janes (2005); La terca memoria (Grijalbo 2007); La reina del Pacífico (Grijalbo 2008); Allende en llamas (Almadía 2008); Secuestrados (Grijalbo (2009); Historias de muerte y corrupción (Grijalbo (2011); Calderón de cuerpo entero (Grijalbo 2012); Vivir (Grijalbo 2012) y Niños en el crimen (Grijalbo 2013).
Scherer García recibió en 1971 el premio María Moors Cabat y en 1977 fue reconocido como el periodista del año por Atlas Word Press Review de Estados Unidos.
En 1986 se le entregó el premio Manuel Buendía 1986 y dos años después rechazó el Premio Nacional de Periodismo, que en ese entonces entregaba el presidente de la república en turno.
En 2001 recibió el reconocimiento Roque Dalton y en el 2002, quizá el reconocimiento que más lo conmovió: el Premio Nuevo Periodismo CEMEX-FNP, promovido por el escritor Gabriel García Márquez, en la modalidad de homenaje.
Un año después, aceptó el Premio Nacional de Periodismo, cuando su organización y entrega se había ciudadanizado.
Ya el 20 de marzo de 2014 recibió el grado de Doctor Honoris Causa de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca.
Y el 3 de octubre pasado, otorgada por el Proyecto Cultural Revueltas, recibió la medalla John Reed por su trayectoria periodística y sus contribuciones a la libertad de expresión.