Hombre excepcional, aportó, con su ejemplo, una extraordinaria obra educativa y humana
El 11 de agosto, se cumplen 104 años del natalicio del Maestro nayarita Severiano Ocegueda Peña, nacido en 1913 en Mazatán, una pequeña población de la costa de Compostela, Nayarit.
Recordar en este espacio periodístico su vida y obra con unas palabras breves, significa reconocer a un hombre que contribuyó con su acción a construir los cimientos del estado de Nayarit, como igual lo hicieron centenares de hombres y mujeres que vivieron la etapa más constructiva de la Revolución Mexicana con el reparto agrario y esa epopeya educativa llamada Escuela Rural Mexicana.
En 1913 Nayarit no había surgido aun oficialmente como entidad federativa, en México transcurría la Revolución Mexicana y en el escenario internacional estaba a punto de estallar la Primera Guerra Mundial. En los siguientes años, Severiano realizó sus estudios en su pueblo, culminó la Revolución y la Primera Guerra Mundial, tras una monstruosa carnicería, acabó con tres imperios, atestiguando el surgimiento de la Revolución Rusa, la revolución que dio origen al primer estado socialista del mundo.
Este fue el trasfondo histórico en el que Severiano aprendió las primeras letras de su padre, que trabajaba como administrador de una hacienda porque sabía leer y escribir; años después Severiano ingresó a la Escuela Normal Rural de Xalisco, de la que egresó en 1933, trabajó como maestros de grupo, fue Inspector Federal de Educación Primaria, fundador del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Director del Ensayo Piloto de Educación Básica de la UNESCO, en Santiago Ixcuintla, Poeta, militante comunista, promotor de la construcción de escuelas y de la fundación de Ejidos, creador de un método para le enseñanza de la lectura y escritura y formador de generaciones de niños nayaritas. Con el método de Severiano, aprendieron a leer y escribir centenares de miles de nayaritas, mexicanos y niños de otras nacionalidades.
Severiano Ocegueda vivió el siglo XX, asumiendo con pasión las grandes contradicciones de este vertiginoso periodo de la historia. Asumió los ideales del socialismo y la lucha de los pueblos con verdadera pasión, la vida lo ubicó del lado de las luchas de los pueblos, en primer
lugar del pueblo de México. En 1972, cuando el voto del pueblo hizo posible la victoria de Alejandro Gascón Mercado como Alcalde socialista de Tepic,
Severiano Ocegueda Peña fungió como Regidor en aquel histórico ayuntamiento que no ha sido superado por su auténtico compromiso con el pueblo de Tepic.
La obra poética de Severiano es inmensa, no sólo por su magnitud, sino por su contenido desbordado de amor a México, a la lucha de los pueblos y su querido Mazatán, donde nació. Severiano Ocegueda Peña, en matrimonio con la maestra tecualense Genoveva Hernández Partida, fue padre de 7 hijos.
Severiano fue un nayarita grande por su obra y por su ejemplo y aunque por su militancia política decididamente opositora y revolucionaria, sus adversarios lo han querido enviar al olvido, los muchos aliados, los amigos, su familia y el pueblo de Nayarit se han encargado de perpetuar su nombre que es inmortal.
Fotografías tomadas del archivo de facebook, de Héctor Severiano Ocegueda Hernández. Edición de imágenes Nota Nayarit.
En la foto destacada: Participación en la Feria de Tepic (Ciclo escolar 1972-1973), Juan Echevarría, Lourdes de Xalisco, Jesús Flores, Emma Arcega, Maestro Severiano Ocegueda Peña, Carmen Pardo, Manuel Sartiaguín, Carmen Partida y Roberto Ahumada.
Fotografía inferior: Acto de graduación de la primera generación de 4 años 1969-1973 “Heroico Pueblo de Vietnam” Mesa del Presídium: Maestro Severiano Ocegueda Peña, Secretario de Educación Pública (en ese tiempo el Secretario de la SEP era el Ing. Víctor Bravo Ahuja) Agregado Cultural de la República de Chile Señor Raúl Roca, Presidente Municipal de Tepic Señor Alejandro Gascón Mercado y el Director de la Escuela Normal Superior de Nayarit Maestro Luis Gámez Jiménez.