Con dinero ahorrado como diputado, asistimos al mundial en Rusia
-SEGUNDA Y ÚLTIMA PARTE-
Desde el 30 de noviembre, Día del Empleado Universitario, en su discurso oficial Luis Manuel Hernández Escobedo se refirió al tema de solicitud de amparo ante la justicia federal por parte de su equipo de abogados. El sentido de la prevención provocó la presentación de solicitud de amparo ante el Juzgado Primero de Distrito contra posibles actos de la Fiscalía General del Estado, jueces de control y policías, entre otras muchas autoridades. Con el amparo se trata de evitar un madruguete sobre una supuesta orden de aprehensión que hasta el momento autoridades responsables no han precisado. Se calcula que en la audiencia constitucional del 30 de diciembre próximo se decidirá si se ofrece suspensión definitiva. Existe el criterio de muchos de que Luis Manuel Hernández Escobedo sea obligado por la oficialidad a abandonar el sitio de secretario general del SETUAN, porque su prolongada estancia de 40 años es un estorbo en el proceso de cambio para la universidad nayarita que exige el gobierno federal. Sin embargo, el dirigente sindical se encuentra más consolidado que nunca, pues hasta fue reelecto presidente de la Asociación Nacional de Sindicatos Administrativos Universitarios (ANSAU). Tampoco advierte Hernández Escobedo que acciones en su contra provengan de Antonio Echevarría García, gobernador de Nayarit, con quien asegura lleva una relación cordial.
Luis Manuel Hernández Escobedo incumplió su promesa pública hecha a este reportero de que abandonaría toda actividad sindical cuando cumpliera 65 años de edad. Hoy tiene 66. Para muchos resulta casi increíble que haya permanecido 40 años como secretario general del Sindicato de Empleados y Trabajadores de la Universidad Autónoma de Nayarit (SETUAN). Al pedirle hiciera autoanálisis de las razones de su larga permanencia, se concretó a decir que son varias, aunque no las definió. Explicó que cuando joven pretendió ser ingeniero zapador con ingreso al Colegio Militar, pues rechazó ser maestro porque en su familia muchos lo eran, incluso su madre y padre. Ingresó a la UAN mediante el departamento de imprenta invitado por el responsable Javier Cervantes Sánchez, debido a la experiencia de Luis Manuel en el manejo de moderna maquinaria offset. A la postre, Javier Cervantes se convirtió en su mentor y guía en las lides sindicales.
Entrevistado en el restaurante que funciona en el mismo edificio del SETUAN, mientras más de treinta agremiados al sindicato hacen guardia fuera del local con motivo de la huelga estallada en la UAN el anterior 20 de noviembre, en exigencia de pago salarial y prestaciones de fin de año, y que llegó a su fin este 12 de diciembre, Hernández Escobedo hace una larga exposición verbal sobre acontecimientos universitarios que él considera de suma importancia conozca la opinión pública. Por ejemplo, sostiene que hace como 10 años promovió la creación de la escuela primaria para hijos de trabajadores. El primer edificio fue construido en aquel entonces por el gobernador Ney González. Una vez cumplidos trámites pertinentes ante la Secretaría de Educación Pública (SEP) se echó a funcionar. Desde un principio se acordó que la universidad cubriría la nómina, mientras que los padres de familia pagan alimentación y el sistema bilingüe, en tanto el sindicato se hace responsable de varios eventos como mantenimiento y otros.
Debido al éxito, enseguida se vino la idea de fundar la escuela secundaria.
Luis Manuel tiene entera certeza que personas de mala fe afirman que las escuelas de educación básica son negocio del dirigente sindical. Explica que en los trámites para el funcionamiento, la SEP les manifestó que a cambio de la integración de una asociación civil les entregaría registro para la validez de estudios, porque en ese momento sólo podía concederles un tipo de clave privada. Se cumplió con la exigencia. Pero además a través de la asociación civil estaban en ventaja de recibir dinero y un sinfín más de donaciones, que se intentaron pero no se logró. Con base en el diálogo la universidad se comprometió a pagar la nómina, aunque primero se hizo a través del SETUAN con cargo al presupuesto, pero el avance de la modernidad provocó que los pagos se hicieran por medio de una tarjeta bancaria, por tanto la universidad dispersa y no el sindicato. El sindicato no se mete en nada, alega el dirigente. Explica que como asociación civil no han recibido un peso, lo cual comprobaron ante la Secretaría de Hacienda federal y ésta a su vez extendió documento para verificar la verdad. Más tarde se consiguió para el CENDI un registro denominado autónomo, que no es público, pero tampoco privado. Para la primaria se entregó un registro llamado algo así como subsidiado que elimina al privado anterior. Hoy hacen gestiones para lograr registro autónomo que les traerá tranquilidad y a lo mejor deshacer la asociación civil. En este sistema de educación básica se atiende a más de 850 alumnos, por tanto 700 padres de familia son beneficiados, de los cuales 60% son trabajadores y 40% académicos. Luis Manuel asegura que cuando el intento de arranque de la secundaria, sus detractores los demandaron y hasta se ampararon. Sin embargo, la respuesta del Colegiado fue en tratándose del derecho humano de los niños no ha lugar, menos cuando la educación es un interés superior.
Expone Hernández Escobedo que durante su gestión como diputado local por el PRD integrante de la XXXI legislatura cobró del fondo de ahorro un millón 676 mil pesos. Sólo dos diputados tuvieron la capacidad de mantener íntegra la cantidad ahorrada, pues los demás lograron merma por la constante solicitud de préstamos. “Cuando llegué (a cobrar) al banco me preguntaron por qué y dónde yo tenía ese ingreso, tuve que explicar. Por ello encontré la posibilidad de invitar a familiares al mundial de futbol en Rusia. Siempre he hecho ahorro para asistir a esos acontecimientos de cada cuatro años, no es nuevo”. Evoca la facilidad de transferencia bancaria de 50 millones de pesos a un trabajador universitario que ganaba cuando mucho diez mil pesos. Ocurre de inmediato un vuelco en su imaginación para asegurar que la UAN cada año paga 130 millones de pesos referente a préstamo bancario, 180 millones de desfase a los jubilados. Por ello se creó en 2002 el fondo de pensiones con base en acuerdo entre Antonio Echevarría Domínguez, gobernador, Reyes Tamez, titular de la SEP, el rector Javier Castellón, Pablo García Galaviz, SPAUAN, y el propio Hernández Escobedo. La creación del fondo de pensiones originó fractura al interior del SETUAN dando paso a la fundación del STUAN, del cual la actual diputada local Margarita Morán fue segunda secretaría general. Los disidentes argumentaron que el gobierno estatal debería resolver el asunto financiero.
Continúa Luis Manuel para aseverar que acordaron aportar al fondo de pensiones hasta el diez por ciento, cinco de entrada, mientras que el 15 por ciento correspondería a la universidad. Entonces empezó autorización de plazas al mismo tiempo que las dobletearon en el presupuesto y subió de 780 millones a mil 100 en el año 2010, al tiempo que surgió la versión rectoral de encontrar el equilibrio financiero. En ese momento dijimos al rector que ahorita que la UAN tiene lana no hay que sacrificar a nuestros compañeros, porque no le ponen tres y nosotros ahí nos quedamos, y lo aceptaron. Pero luego ocurre que el gobernador Ney González no entrega a la universidad lo correspondiente a 18 meses de subsidio estatal, pero esta se sostuvo con la ligera bonanza que registró. En 2012 con Roberto Sandoval al frente del gobierno la universidad entra en crisis. Este se compromete a entregar 10% del presupuesto de gobierno a la alma mater y lo cumple. Con el propósito de subsanar los 18 meses sin subsidio, mediante decreto se intenta enajenar en favor de Finanzas estatal el terreno del derribado estadio de beisbol en Tepic. En el artículo 10 de este documento se especifica que el resulta de la venta se entregara en su totalidad a la UAN para cubrir adeudos de años fiscales anteriores. El gobernador actual, Antonio Echevarría García, en uno de sus primeros actos de gobierno fue ir al Parque de la Dignidad –como hoy se nombra al terreno en cuestión- y anunciar que se deroga el mencionado decreto para dar paso a otro al tomar en cuenta que el terreno está en poder de la ciudadanía. Asumió resolver el problema financiero en común acuerdo con el rector Nacho Peña.