Se rasca donde no le pica
Vaya que se pasó de ingenuo el diputado priista Armando Vélez Macías al pedir respeto para sus correligionarios que en el pasado fueron presidentes del Ayuntamiento de Tepic, pero que son señalados por no entregar a la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN) lo recaudado por concepto del impuesto especial del 12 por ciento durante sus respectivos periodos constitucionales.
Enérgico se mostró en posteos de Facebook cuando observó que Guadalupe Francisco Javier Castellón Fonseca, actual alcalde de Tepic, replicó una información detallada hasta con gráficas sobre los millones de pesos que los presidentes municipales Ney González, Manuel Cota, Roberto Sandoval y Héctor González Curiel “El Toro” dejaron de aportar a la UAN por el concepto antedicho.
Pero la inocente criatura, el diputado Vélez que se asumió como tontejo, jamás se enteró que no fue posesión de Castellón Fonseca como supuso a pie juntillas, tanto que le reclamó en tres post su proceder contra sus correligionarios, en el pasado titulares del gobierno municipal de Tepic. Pero tampoco se dio cuenta que Guadalupe Francisco Javier replicó ese comentario que otra persona subió al Facebook con fecha de hace un año. Cuando una compañera le hizo ver esto último, el diputado Vélez calló.
El legislador priista Armando Vélez, con la representación de su grupo parlamentario en la trigésima segunda legislatura, abordó la tribuna en la sesión solemne del 18 del presente para iniciar el segundo periodo ordinario de sesiones del primer año de ejercicio constitucional, pero olvidó hacer la defensa a ultranza de los priistas presidentes municipales de Tepic que son señalados como deudores a la máxima casa de estudios de Nayarit. Pidió respeto, pero los gobernantes municipales no lo tuvieron para los universitarios.
Su intervención versó en la exigencia al titular del Poder Ejecutivo, Antonio Echevarría García, sobre la “apertura y diálogo con las fuerzas políticas representadas en el Congreso del Estado” y además a “mantener un permanente acercamiento con el Poder Legislativo para atender los grandes temas de interés para Nayarit”.
Con base en su acendrado priismo, seguramente el diputado Vélez olvida que el anterior gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval Castañeda, también priista, jamás de los jamases tuvo acercamiento y diálogo con los diputados de oposición que integraron las dos legislaturas en su periodo sexenal. Tampoco fue proclive al intercambio de ideas con las dirigencias de los partidos de oposición al suyo. Siempre desdeñó los encuentros, muy a pesar que se los solicitaron.
Luego en un documento que leyó, en parte con equívocos, lo que hace suponer con certeza que el discurso de ocasión fue elaborado por alguno de sus asesores, el diputado priista Armando Vélez pide al gobernador Echevarría se castigue con rigor a todos los funcionarios del anterior gobierno priista que actuaron fuera del marco de la ley, es decir, aquellos de quienes se presume cometieron actos de corrupción en sus diferentes modalidades. Pero implora sancionar mediante la aplicación de procedimientos serios para los que lastimaron la hacienda pública estatal y con ello se haya dado origen a riquezas inexplicables.
Además retador exige al mandatario estatal que sus dichos sobre los funcionarios corruptos del gobierno sandovalista se justifiquen con elementos técnicos jurídicos, o de lo contrario guarde silencio.
Precisamente este lunes 19, en un noticiario radiofónico, Rodrigo González Barrios, vocero de la Comisión de la Verdad, hizo una amplia exposición sobre las demandas penales presentadas ante la PGR y Fiscalía General de Nayarit contra el ex gobernador Roberto Sandoval y compinches, acusados bajo la presunción de ser autores de diversos y variados delitos cometidos durante la administración estatal (2011-2017). El perredista González Barrios, sólo para citar un ejemplo, dio a saber que Roberto Sandoval tiene en propiedad nueve que se pueden considerar ranchos diseminados en la entidad. Hay testimonios documentales, no son chismes, aseveró Rodrigo.
Satisfecho a medias con el liderazgo de Polo, el diputado priista Vélez arremetió al demandar también al presidente del Congreso del Estado, diputado panista Leopoldo Domínguez González, diálogo y mayor acercamiento con la mayoría de los actuales legisladores. Este último reviró al indicar que la postura de Vélez es un asunto personal, pero al parecer desconoce que hay diálogo.
Polo Domínguez dijo que el trato a los diputados priistas es de mucho respeto, mejor que como ellos han tratado durante mucho tiempo a los legisladores de la oposición. Nunca nos han tratado como nosotros lo hacemos actualmente. Luego dejó entrever que el posicionamiento de Armando Vélez el día de la sesión solemne de apertura, al igual que la participación en tribuna de buen número de diputados, es ejemplo de democracia legislativa. Es más, el diputado presidente en la crítica, el diálogo y el análisis encuentra la mayor fortaleza de esta 32 legislatura.
Como se le queman las habas, desde la oficialidad suplican al diputado Vélez guarde calma y tranquilidad, le prometen que los dichos del gobernador Echevarría se convertirán en hechos. Quien la hizo la pagará, habrá sanciones ejemplares, más de algún notable será depositado tras las rejas, pues hay suficientes elementos para ello. Aunque a paso de tortuga, pero las primeras acciones de justicia las veremos dentro de seis meses.
Mientras al diputado priista Armando Vélez Macías, demandante de diálogo y más diálogo, en su excesivo protagonismo político, bien se ve que se rasca donde no le pica.