La preocupante nueva Legislatura
PREOCUPANTE LA TRIGÉSIMA CUARTA LEGISLATURA.
Si los rumores son ciertos -y casi siempre lo son-, el próximo titular del Poder Legislativo será el diputado Salvador Castañeda Rangel. Siguiendo la regla no escrita de la política local, es el gobernador del estado quien decide quién habrá de hacerse cargo de la presidencia del congreso. Me dicen que la decisión obedeció a que no quiere más mujeres con cuotas de poder considerables y que se siente mucho más cómodo rodeado de varones con bajo perfil, como el actual diputado presidente, Sergio Arturo Castillo alias “Masecas”. Además, Castañeda Rangel tiene otras dos cartas de presentación: fue alcalde de Huajicori entre 1993 y 1996, durante la primera mitad del gobierno de Rigoberto Ochoa Zaragoza, coincidiendo con la época en la que el gobernador fungió como secretario de salud. Trae también el visto bueno de la presidenta de MORENA, la dirigente partidista más cercana a los afectos del gobernador, Elizabeth López Blanco, debido a que el diputado del distrito 1 fue subordinado suyo en SEPEN, cuando éste fungió como jefe de departamento de educación primaria indígena.
Del perfil del señor nada se puede decir porque poco se sabe. De confirmarse su nombramiento, llegará al congreso a hacer lo que han hecho sus antecesores: obedecer a pie juntillas las indicaciones del gobernador Navarro Quintero en lo político, de Gabriel Camarena y Javier Mercado en lo jurídico y de Elizabeth López Blanco en lo económico. Así es, amable lector, así funciona el congreso del estado. Durante la gestión de la diputada Alba Cristal Espinoza, el congreso fue la caja chica del gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero, pero con el arribo de los diputados Nataly Tizcareño, Francisco Piña y Sergio Arturo Castillo, la estructura financiera del Poder Legislativo es controlada en su totalidad por la actual dirigente morenista, sin cuya autorización no se mueve una hoja en el congreso local, al menos, en cuanto al manejo de recursos se refiere.
De los diputados de MORENA y sus aliados hay muy poco qué decir. Considero que no es necesario ni aprendernos sus nombres pues sabemos muy bien qué esperar de ellos: nada.
Me preocupa más bien la oposición o, mejor dicho, la inexistencia de esta. La fracción parlamentaria de MC en esta legislatura estará compuesta por los diputados Verónica Gamboa, Enrique Gascón e Iván González Solís. Los dos primeros, muy cercanos de manera personal al coordinador de MC en el estado, Nacho Flores, cuya libertad y el respeto al acuerdo hecho entre el gobernador y este partido político en el pasado proceso electoral significará un dique que limitará sus funciones. En el caso de Iván González, es más cercano a la dirección nacional emecista y habrá qué ver en qué clase de diputado desea convertirse. Mi predicción es que serán una bancada blanda, que aborde temas intrascendentes y que vote al lado del gobernador, sin importar el interés de los nayaritas, siempre y cuando se proteja la libertad de Nacho Flores.
Nadia Ramírez y Ramón Cambero conformarán la bancada del PAN.
El segundo ha sido un buen tribuno -cuenta con experiencia suficiente, pues ésta será la tercera vez que llegue al congreso y ha sido también diputado federal-. Lastimosamente creo que la actuación de ambos legisladores estará sesgada por el miedo y eso los hará también convertirse en una oposición blanda. Es bien conocido el hecho de que a la expresidenta municipal de Xalisco la han amedrentado para que no buscara nuevamente ser alcaldesa en las elecciones de este año, so pena de habilitar contra ella numerosas carpetas de investigación de su gestión como presidenta municipal entre 2017 y 2021. El encargado de enviar el mensaje ha sido Javier Mercado, expanista y hoy secretario particular del mandatario. En le caso de Ramón, seguramente será la misma historia. Su esposa es la actual presidenta municipal de Ixtlán del Río y, de buena fuente sé, que también se ha ordenado fabricar contra ella carpetas de investigación -igual que contra los alcaldes en funciones Heriberto Castañeda, José Luis Tovar y Romina Chang- en esta tierra donde el gigante sigue dormido pero el gobernador se alimenta de miedo.
Por RSP llega Jocelyn Fernández, quien será así diputada por tercera vez. Aunque creo que es un excelente ser humano, no me atrevería a esperar de ella una oposición digna. Fue propuesta como candidata plurinominal en el partido liderado por Nayar Mayorquín como parte del presunto acuerdo que también impulsó el gobernador Navarro con Mayorquín Carrillo. Desconozco si se llevó o no a cabo dicho acuerdo, pero en gobierno del estado se ufanan del recurso económico que dieron para la campaña de RSP y que este partido sirvió para canalizar a algunos candidatos que el gobernador no pudo postular por MORENA, dando además el plus de humillar a Mayorquín Carrillo en la elección por Tepic, dejándolo incluso fuera del cabildo tepiqueño. La presencia de Fernández Molina como diputada que encabezó la lista pluri, desplazando a liderazgos propios como Rosalba Llamas o la señora Rosy Santos, son una prueba difícil de cuestionar.
En el caso de los diputados Cristóbal Calderón y Jorge Salvador Álvarez, quienes serán los diputados representantes de Levántate para Nayarit y de Nueva Alianza, tampoco me permito tener muchas expectativas. Serán legisladores dóciles que tal vez voten en abstención o en contra solo cuando se trate de cuestiones que atañan a las organizaciones sindicales que representan. Más allá de eso, los señores llegan limitados por ese miedo que todo mundo parece tenerle al gobierno y por sus propias limitaciones de carácter y como tribunos. Armando Vélez fue diputado ya en la XXXI Legislatura y salvo dos o 3 buenas participaciones en tribuna, es poco lo que se recuerda de él. El miedo a las carpetas de investigación que en este gobierno se reparten con singular alegría, considero, volverá a ser un factor para su docilidad.
En el camino, parece haberse quedado otra vez Adán Casas, a quien esta encomienda le había sido prometida. Ha sido víctima el diputado electo de que el gobernador y su grupo político piensan nuevamente instalar en la alcaldía de Tepic en el 2027 a López Blanco y darle la presidencia del congreso al exalcalde de Santa María del Oro podría darle proyección. Para nadie es un secreto que Adán Casas ha vuelto la alcaldía de Tepic su sueño, siguiendo los pasos del ingeniero Amado Rubio.
Frente a este escenario, a los nayaritas nos esperan otros tres años de abusos en los que el gobierno será un cómplice mudo ¡Dios quiera que me equivoque!