Si las elecciones intermedias en fecha reciente celebradas en Nayarit sirven para calificar al gobierno de Roberto Sandoval, el resultado es deficitario.
Con mucho los partidos de oposición a la alianza por el bien de Nayarit donde se inserta el PRI aventajaron en votación a ésta. Lo que quiere decir que el gobierno sandovalista resultó reprobado.
Aun así el PRI y adláteres hayan logrado victorias en 16 de 20 municipios, 80 regidurías y 14 diputaciones de mayoría relativa, haber perdido el municipio de Tepic, asiento de los poderes del Estado, representa humillación sin precedente.
Y es así, porque el gobernador Sandoval fue el mayor interesado en ganar el municipio de Tepic, para ello no escatimó recurso material, humano y económico. Funcionarios del gobierno de la gente gravitaron en torno al proceso electoral en desacato a la ley.
Delegados de las diversas dependencias del gobierno federal que al gobernador Sandoval deben el favor de ocupar un lugar en la dorada burocracia, recibieron la orden de incidir en el proceso electoral. Marcada fue la intervención de la delegada en Nayarit de Sedesol, Noemí Galindo Ponce, quien al ser pillada fue suspendida para investigación. Seguro es que será reinstalada.
Noemí Galindo Ponce, en la campaña del 2011, donde Roberto Sandoval compitió como candidato del PRI a gobernador, se encargó de repartir despensas a los habitantes de las colonias de Tepic a cambio del voto para el tricolor. A su domicilio particular a diario llegaban camionetas cargadas de despensas para ser distribuidas. Se ganó la confianza de Roberto, llegó al cargo en Sedesol, pero le quedaron las malas mañas.
Además de la importancia política y económica del municipio de Tepic, al gobernador Roberto Sandoval le urgió ganar porque llevar a su alter ego a la presidencia municipal, significaba contar sin mayores problemas con el candidato favorito a la gubernatura de Nayarit, con base en el antecedente de Ney González y el propio Roberto que desde allí se catapultaron a la máxima magistratura de la entidad. Sin embargo, los planes dieron un giro inesperado.
Ello abre una rendija de posibilidad al senador Manuel Humberto Cota Jiménez en el proceso de nominación en 2017 del candidato del PRI para gobernador de Nayarit, abertura que podría alcanzar anchura de enormes dimensiones conforme éste sepa mover influencias y compromisos políticos en el centro de las decisiones del país. Pero sin duda, para entonces habrá un encontronazo con el mandatario estatal tozudo como está en imponer candidato. Dirigirá ahora la mira al que para ese tiempo será diputado a la XXXI legislatura local: Gianni Ramírez Ocampo.
En estas elecciones del domingo 6 de julio hubo candidatos que frustraron su deseo de ser alcaldes por segunda y hasta tercera vez al ser derrotados. De los primeros están el doctor Saulo Lora Aguilar que con las siglas del PRD compitió en Acaponeta, Carlos Luna Quirarte “Caluqui” que al amparo del Partido del Trabajo participó en San Blas y Eduardo Valenzuela Alba por Movimiento Ciudadano en Tuxpan, mientras que Héctor Paniagua intentó sin lograrlo ser por tercera vez presidente municipal de Bahía de Banderas por el PRD.
La otra cara de la moneda, es decir triunfadores por segunda vez fueron José de Jesús Bernal Lamas (PAN) en Ahuacatlán, Alicia Monroy Lizola a (PRI) en Compostela, e Hilario Ramírez Villanueva (Independiente) en San Blas.
Diputados con licencia que sufrieron derrotas electorales como candidatos a presidente de ayuntamiento son: Luis Emilio González Macías (PRI) en Ahuacatlán. Gerardo Palomino Meraz (PAN) en Compostela, Javier Ernesto Ulloa Joya (PRI) en San Blas, José Antonio Serrano Guzmán (PAN) en Tuxpan. Asimismo, la diputada Jocelyn Patricia Fernández Molina (PRI) perdió en Tepic la síndicatura.
Ganaron alcaldías los diputados Fátima del Sol Gómez Montero (PRI) en Santiago Ixcuintla y Leopoldo Domínguez González (PAN) en Tepic.
Sin embargo, impugnarán la elección, además de que por mandato de ley deberá contarse voto por voto, Luis Emilio González Macías, quien pierde por una diferencia de 46 votos; Gerardo Palomino Meraz, quien en contra tiene sólo 254 sufragios, y aprovechando el viaje José Antonio Serrano Guzmán por irregularidades en urnas y actas de escrutinio.
Lo más seguro es que los legisladores perdedores regresarán a su curul en la trigésima legislatura, pues aunque terminan periodo el 18 de agosto venidero, aún les queda por recibir jugosas compensaciones, sobre todo el fondo de ahorro.
